Besar el Hijo de Dios
“Servir al Señor con temor”, dice el salmo segundo (versículo 11). Algunas personas piensan erróneamente que temer al Señor significa acobardarse porque es malo. ¡No! ¡Dios nunca es malo! Temer al Señor es reverenciar a nuestro Creador y Juez. ¡Es temblar ante él como el que tiene el poder de la vida y la muerte!…