¿Qué transformación tan maravillosa comienza en la vida cuando oramos de nuestro corazón: “Tú eres mi Señor; no hay para mi bien, fuera de ti” (Salmo 16: 2).

Las preocupaciones se desvanecen. Las irritaciones se disipan. Estar ocupado cesa. El espíritu se levanta. El tiempo se vuelve santo.

Estamos justo donde necesitamos estar cuando nuestros corazones claman a Dios: “Tú eres mi Señor; no hay para mi bien, fuera de ti “.

Que la oración de David viva en ti

¿Conoces esta oración de David? Ha pasado algún tiempo dejando que viva en ti hasta que se arraiga en tu corazón con  al Señor y comienza a arder dentro de ti.

Los cristianos primitivos sabían esta oración. Los Apóstoles hizo hincapié en la importancia del Salmo 16 como profetizando a Jesucristo y su resurrección. Oraron este Salmo para ayudarles a comprometerse con Cristo resucitado, participando en la vida eterna que él quería vivir a través de ellos en el ahora.

Conecte con el Padre, el Hijo y el Espíritu

¡Gozo! ¡Gozo! ¡Gozo! Cuando nos conectamos con el Hijo de Dios en el Salmo 16 nos conectamos también con el Padre y el Espíritu Santo. ¡Seguir a Jesús en la comunidad trinitaria es la más maravillosa bendición!

Vamos a hacerlo ahora. Me gustaría compartir con ustedes una de mis oraciones preferidas trinitarias que escribí basado en el Salmo 16:2:

Mi todo en todo: Abba, Jesús, Parakletos 

Abba… Aparte de sus brazos de amor no tengo nada bueno

Jesús… Aparte de su cruz no tengo nada bueno

Parakletos… Aparte de su aliento de vida no tengo ninguna buena cosa

Yahvé … Aparte de ti no tengo ninguna buena cosa

Oración de aliento

Para ayudarle a amar al Señor con todo su corazón puede intentar pasar unos minutos usando “Mi todo en todo” como una oración de aliento. Esta es una manera de utilizar su cuerpo para ayudarle a reducir la velocidad de su oración, pensar profundamente, y participar de su corazón (voluntad) con la Palabra de Dios. Me parece que el ritmo de la respiración me ayuda a mantenerme comprometido con Dios:

Respire a recibir de Dios a medida que susurras su nombre.

Aguante la respiración para permanecer en su apreciación del amor de Dios.

Exhale a dejar ir todo el aire, excepto Dios cuando susurras la segunda parte

¿Qué paz, propósito, poder? ¡podemos experimentar en la dulce sociedad de las personas divinas!

Practica la Presencia de Dios

Es posible escribir esta oración trinitaria abajo en un pequeño pedazo de papel para llevarlo en el bolsillo y memorizarlo para que pueda orar por momentos a lo largo de su día o mientras esta acostado en cama para quedarse dormido.

¡Qué bendición es entrenar nuestras almas en una oración de devoción al Señor de esta manera¡. Saturar tu mente en presencia trinitaria. Deja que Dios llene tu cuerpo y comprometer su corazón. Apreciando la suficiencia encantador de la presencia Padre-Hijo-Espíritu con que cambia la forma en que participa en los eventos de su día, la forma de responder al estrés, y cómo usted se preocupa por las personas que te rodean.

¡O vivir con devoción incondicional al Señor! Amarlo y honrarlo en todo lo que hacemos. ¡Hacemos que todo en la vida sea hermoso!

Que puedas crecer en el amor del Padre, el Hijo y el Espíritu. Que regocijo es aprender a hacer el Señor tu todo en todo. Iirradiar con la vida de Cristo a las personas que te rodean.

Leave a Reply

Your email address will not be published. Required fields are marked *